jueves, 26 de febrero de 2009

Encuentra consuelo recordando a los que sufren


Mira a tu alrededor, hacia ambos lados. ¿No ves a los que sufren y padecen? En cualquier hogar hay penas y lágrimas que corren por las mejillas.


¿Cuántas tribulaciones se padecen y cuántas personas perseveran con paciencia? Tú no eres el único que tiene problemas, los cuales son pocos si se comparan con las dificultades de los demás. ¿Cuántos enfermos permanecen postrados durante años sufriendo un dolor inexplicable?
Cuántos no han visto la luz del sol en años debido a que están presos, sin saber lo que sucede fuera de las paredes de su celda?
¿Cuántos hombres y mujeres han perdido a sus hijos cuando éstos eran apenas unos niños? ¿Cuántas personas sufren problemas y tormentos?

Es hora que encuentres consuelo en aquellos que están mucho peor que tú, debes saber que esta vida es como una prisión para el creyente, una morada de dolor y tristeza: Los castillos pueden estar desbordados de habitantes durante la mañana; y en un ins¬tante sucede un desastre y quedan vacíos y desolados. La vida puede ser tranquila, el cuerpo puede tener buena salud, la riqueza puede ser abundante y nuestros hijos pueden ser sanos, pero en cuestión de días, la pobreza, la muerte, la separación y la enfermedad pueden tomar su lugar.


“Habitasteis en los mismos territorios que vivieron quienes [no creyeron] y fueron injustos consigo mismos, y a pesar de que os enterasteis de cómo les aniquilamos y de que os expusimos muchos ejemplos para que reflexionarais no creísteis.” (Corán 14:45)


Deberías adaptarte como lo hace el camello experimentado, que cuando es necesario, tiene la habilidad de arrodillarse sobre una roca. También deberías comparar tus dificultades con las de aquellos que te rodean y los que te precedieron. Deberías darte cuenta que estás bien en relación a ellos y que las tuyas no son más que pequeñas dificultades. Por eso alaba a Allah (Exaltado y enaltecido sea) por Su amabilidad, sé agradecido por lo que te ha concedido, busca en Él la recompensa por lo que se ha llevado y busca consuelo en aquellos que sufren.

Un ejemplo perfecto es el que nos dio el Profeta (ByP) por medio de sus actitudes, en muchas oportunidades. Mientras rezaba le pusieron sobre su cabeza las entrañas de un camello; sus pies sangraron; su rostro fue fracturado; se encontró sitiado en un paso montañoso hasta tal punto que se vio obligado a comer hojas de los árboles; fue expulsado de La Meca; le rompieron un diente durante una batalla; su esposa siendo inocente fue acusada de adulterio; setenta de sus compañeros fueron asesinados; tuvo que afrontar la pérdida dé su hijo y de la mayoría de sus hijas; para aliviar el hambre extremo que sentía llegó al punto de atarse una roca al estómago; y también lo acusaron de ser poeta, mago, adivino, demente y mentiroso... le tocó vivir todo esto en poco tiempo. Aún así Allah (Exaltado y enaltecido sea) lo protegió a lo largo de ese período de sufrimiento. Muchas personas han tenido que enfrentan terribles dificultades. El Profeta Zacarías (P) fue asesinado, el Profeta Juan (P) fue decapitado, el Profeta Moisés (P) sufrió tremendas angustias, Abraham (P) fue arrojado al fuego y los Califas Rectos siguieron el mismo camino: `Umar (R) fue asesinado, al igual que `Suman (R) y Ali (R). Muchos sabios en el pasado fueron azotados, apresados o torturados.

“¿O creéis que vais a entrar al Paraíso sin pasar por lo mismo que atravesaron quienes os precedieron? Padecieron pobreza e infortunios, conmoción...” (Corán 2:214)



A’id ibn Abdullah al-Qarni
Traducción: Lic. Sabina Rigoni
Publicado por: Nurelislam y ArabEspañol

1 comentario:

Anónimo dijo...

Your blog keeps getting better and better! Your older articles are not as good as newer ones you have a lot more creativity and originality now keep it up!